Puta Zahara...
A veces pudiera parecer cíclico. La vida, las circunstancias, las cosas, las personas... Fue allá por el 2009 cuando descubrí por primera vez a Zahara. Dulce aspecto de chica pop con canciones evocadoras (algo melosas a su manera) e intimista. No cabe más decir que desde entonces se convirtió una compañera musical en los días venideros. Y es curioso que de todas las veces que la tuve en la mira para ir a un concierto suyo, nunca se me dio ninguna (y no fueron pocas las oportunidades). Tendría que ser en México, lugar donde por primera vez pulsé PLAY a su primer disco (el de Universal), donde por fin la viera por primera vez en un directo.
Una guitarra y una voz, ¿para qué más?
Claro que ahora ya no era la inocente chica pop que perdió el avión, yo aunque enamorado de aquella imagen más que fascinado con su actual yo sublevado, contestatario e irreverente, que coquetea con la electrónica sin dejar de ser ella en sus letras. La magia de la creación sin restricciones.
Merichane en directo suena igual de bien.
El concierto fue un recorrido de su yo inicial (reinventado) a su disco más actual e irreverente Puta. En un espacio pequeño como es el Foro Indie Rocks de la CDMX, una apuesta segura para garantizar el lleno y perfecto para el formato que traía, acompañada de Martí Perernau IV y su magia.
Aquí ya fue cuando se les fue de madre.
Si esta canción no te hizo enamorarte de esta chica desde la primera vez,
nunca entendiste nada.
nunca entendiste nada.
Aunque antes de reventarlo todo con el bailoteo, bajar a bailar con nosotros, alocarse y dejarse el alma en el escenario y la pista, nos regaló Con las ganas con menos lágrimas pero igualmente intenso. Ya después de eso lo que le siguió se le puede llamar euforia , sobretodo si cierras con Berlín U5 en versión extendida Puta Rave.
Gracias.
Todo un público diverso en todos los sentidos habidos y por haber
le dimos las gracias por una experiencia increíble.
le dimos las gracias por una experiencia increíble.
Tengo el vicio de adoptar las tracklist de los conciertos, que casi siempre las consigo porque es un fetiche bastante raro. Pero así soy. La dejo a continuación porque siempre es una bonita forma de revivir el concierto creándote una playlist con las canciones en el orden adecuado.
Puta Zahara, gracias.
Puta Zahara, gracias.
Yo a esto le llamo: Carta de amor interceptada.